ICLI en la India: un nuevo hito

El proyecto se centra en la población tribal de Kathkari en Maharashtra, en la costa del mar de Arabia. Se trata de un colectivo fuertemente arraigado al bosque y a las montañas. Trabajan los campos, pero no son dueños de la tierra. Llevan una vida nómada obligando a los niños a abandonar la escuela y provocando el desarraigo de sus mujeres. Viven en chozas fabricadas con hojas y bambú y, en el mejor de los casos, techos de teja. Su sistema de salud es muy débil. El suministro de agua es precario y escaso. No existe red de saneamiento. Las carreteras son caminos de tierra improvisados. La luz eléctrica ha llegado a las aldeas, aunque la mayoría de viviendas están enganchadas a la red general de manera irregular. Uno de los aspectos más oscuros de su cultura ancestral se encuentra en los matrimonios infantiles, así como en el propio trabajo infantil y el trabajo en pago de deuda, aspectos, por otro lado, prohibidos en el país.

Es en este complejo contexto donde se desarrolla el proyecto que contempla la educación de la juventud y el empoderamiento de la mujer.